27 Jun Mitos y verdades sobre ir al psicólogo
Ir al psicólogo todavía arrastra muchos estigmas y falsas creencias. Aunque la salud mental está cada vez más presente en las conversaciones cotidianas, muchas personas siguen dudando antes de pedir ayuda por ideas que no siempre se corresponden con la realidad.
En este artículo, quiero desmontar algunos de los mitos más comunes sobre la terapia psicológica y ofrecer una mirada más clara y honesta sobre qué significa realmente acudir a un profesional.
Mito 1: “Solo va al psicólogo quien está muy mal”
Verdad: La terapia no es solo para las crisis extremas. Muchas personas acuden al psicólogo para conocerse mejor, gestionar sus emociones, resolver conflictos o tomar decisiones importantes. La terapia no es solo una red de emergencia, sino también una herramienta de crecimiento personal.
Mito 2: “Hablar con un amigo es lo mismo”
Verdad: La terapia no es una conversación informal. Un psicólogo no solo escucha: también observa, analiza, acompaña y guía con herramientas profesionales basadas en la evidencia. A diferencia de una amistad, el espacio terapéutico está pensado para ti, sin juicios ni intereses personales.
Mito 3: “Pedir ayuda es de débiles”
Verdad: Pedir ayuda requiere valentía. Reconocer que algo no va bien y querer cambiarlo es un acto de madurez emocional. Afrontar lo que duele o lo que cuesta no es un signo de debilidad, sino de fortaleza y responsabilidad contigo mismo.
Mito 4: “El psicólogo me dirá qué hacer”
Verdad: La terapia no impone soluciones. El objetivo no es que el profesional decida por ti, sino ayudarte a encontrar tus propias respuestas. El psicólogo facilita el proceso de comprensión y toma de decisiones, pero no dirige tu vida.
Mito 5: “Voy a estar años en terapia”
Verdad: La duración depende de cada caso. Hay procesos breves y otros que requieren más tiempo, pero siempre se adapta a las necesidades y objetivos de la persona. En muchos casos, unas pocas sesiones ya generan cambios significativos.
Mito 6: “Si voy al psicólogo, es que estoy loco”
Verdad: Cuidar tu salud mental no tiene nada que ver con la locura. La salud mental es parte integral del bienestar, como la salud física. Acudir a terapia no significa tener una patología grave; significa que valoras tu equilibrio emocional y quieres estar mejor.
Cuidarse es romper con los mitos
Ir al psicólogo no es rendirse, no es exagerar, no es un lujo. Es escucharse, es responsabilizarse de uno mismo, es atreverse a mirar hacia dentro. Y también es reconocer que no tenemos por qué poder con todo a solas.
Cuanto más rompamos estos mitos, más personas podrán pedir ayuda sin culpa, sin miedo y sin prejuicios. Y eso, en sí mismo, ya es parte del proceso de sanar.